10 de abril de 1961, Bloomington, Illinois, E.U.A.

 

1 Dios lo bendiga hermano. Es un gran privilegio estar de nuevo esta noche en la casa del Señor, para... en servicio con Uds. hermanos y hermanas en una fe igualmente preciosa del Señor Jesús. Yo pienso que mucho de ello fue de mi parte anoche, de que quizás los retuve un poco tarde. Yo tengo la-la reputación de tener servicios extensos. Yo nunca los he retenido toda la noche. Yo nunca he tomado más tiempo que eso. Yo como que me comparo con el apóstol Pablo cuando él predicó toda la noche, y el muchacho se cayó del balcón y se mató. Y él tendió su cuerpo sobre él y el muchacho volvió a vida.
Así que, alguien me dijo, él dijo: "Hermano Branham, Ud.-Ud. habla un poquito extenso". Bueno, yo tengo tanto de que hablar, que sencillamente no lo puedo sacar todo en una sola vez. Yo sólo... Desde que Cristo me llenó con Su Presencia, bueno, yo he tenido tanto que decir al respecto.
2 Y así que esta noche vamos a tratar de dejarlos salir temprano, porque sí pienso de considerar a aquellos que tienen que recorrer una larga distancia, y Uds. tienen que ir a trabajar, y todo lo demás. Quizás un poquito después durante la semana, nos prolonguemos sólo un poquitito más.
Y miren, anoche oramos por los enfermos, o lo que llamamos... muchas veces lo referimos como "servicio de sanidad". Por supuesto nosotros no... Sabemos que nosotros no sanamos a nadie, sino que sólo oramos por ellos. Y yo nunca he sanado a ninguno todavía, sino que ciertamente he tenido algunas grandes respuestas a la oración, viendo que el Señor sana a los enfermos. Y así que esa es la razón por la cual estoy aquí, es para tratar de tener compañerismo con Uds. alrededor de estas cosas.
Y no únicamente para la sanidad del cuerpo, sino la sanidad del alma también, lo cual es mucho más esencial que la sanidad del cuerpo. Miren, es posible que si Uds. viven bastante tiempo, se volverán a enfermar otra vez, porque la enfermedad... La Biblia dice: "Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librará Dios". Así que tenemos muchas aflicciones prometidas, pero una liberación de ellas.
3 En la discusión, cuando el fallecido Jack Coe... Muchos lo han de haber conocido a él. El era un amigo mío muy personal. Yo tenía gran respeto por el Hermano Jack. Y él tenía tal (perdonen la expresión) fe como un "perro bulldog" [perro caracterizado por su fuerza y tenacidad-Trad.] que se aferraba a la sanidad. Y él... Alguien subía a la plataforma con muletas, y él tenía una hacha o algo allí, con las que las cortaba y las quebraba, antes que él aun orara por ellos. Ellos ya no se iban a salir con las muletas. Y si ellos no se podían ir caminando, ellos se podían ir gateando, hasta que tenían la fe suficiente para....
Y él tenía un pequeño yunque y un martillo allí, y si alguien subía a la plataforma con lentes, para que se orara por sus ojos, él se los quitaba y se los quebraba en el yunque y los arrojaba a un lado.
4 Así que se metió en un problema allá en la Florida. Satanás le puso una trampa con un niño a quien le quitó los aparatos ortopédicos. Por supuesto Uds. saben la historia. El Reverendo Gordon Lindsay estuvo allí en el juicio cuando el juez dijo: "¿Reclama Ud. que ese muchacho fue sanado?"
Y el Hermano Jack dijo: "El sí fue sanado".
"Oh", dijo: "No hay tal cosa como esa".
Dijo: "Cuando yo le quité los aparatos ortopédicos, él caminó a lo largo de la plataforma. El dijo que él había sanado".
Dijo: "Mire, si Ud. puede mostrar una sola Escritura en donde Dios hizo algo así, que fue sano aquí, o algo, y que sólo duró un momento, bueno, yo estoy dispuesto a aceptarlo".
El Hermano Lindsay se levantó y dijo. "Yo puedo mostrar una Escritura".
Dijo: "Oigámosla".
Dijo: "Una noche en un mar tempestuoso, Jesús le dijo a Pedro que fuera hacia El andando sobre el agua. Mientras él anduvo... El anduvo sobre las aguas mientras él creyó, pero cuando él descreyó, él se hundió".
5 Así que eso es correcto. Así que el juez anuló el caso. Ya no había más que decir al respecto. Eso es exactamente correcto. ¿Ven?, él sí estaba... Mientras él iba andando, estaba bien; pero cuando él empezó a dudar, se hundió.
Y eso es exactamente cuánto tiempo dura la sanidad Divina: mientras Uds. lo crean. Y eso es cuánto tiempo dura la salvación: mientras Uds. la crean.
Alguien me dijo hace tiempo, dijo: "Hermano Branham, a mí no me importa lo que Ud. me muestre, lo que Ud. diga, o cualquier otro, que... Ud. pudiera resucitar a diez personas muertas, y hacer andar a todo cojo", dijo, "yo todavía no lo creería".
Yo dije: "Seguro que no. No fue para incrédulos; fue sólo para aquellos que creen". Eso es todo. Es sólo para creyentes.
Jesús dijo: "Para aquellos que creen". Los incrédulos ni siquiera están incluídos, ¿ve? Ud. es sólo para dar lástima. Hay algo mal en alguna parte. Así que, si Ud. es un creyente, bueno, es para Ud. Si Ud. no es un creyente, entonces no es para Ud.
6 Y alguien dijo: "¿Diría Ud....?" Estaba en la calle un día, dijo: "¿Pudiera Ud. decir qué está mal con este hombre parado en la esquina?"
Yo dije: "¿Sabe Ud.?, Dios se lleva a Su hombre pero nunca Su Espíritu". Su Espíritu que estaba sobre Elías vino sobre Eliseo, luego sobre Juan. El que estaba sobre Jesús vino sobre la Iglesia, y así por toda la edad. Satanás hace la misma cosa. Se lleva a su hombre pero nunca a su espíritu. Yo dije: "Me recuerda cuando ellos pusieron un trapo cubriendo los ojos de Jesús allí en el tribunal esa mañana, y lo golpearon en la cabeza con una vara, y dijeron: 'Profetiza y dinos quién te pegó, y te creeremos. El nunca abrió Su boca para decir ni una sola palabra, porque El no payaseaba para la gente; El únicamente obedecía a Dios". ¿Ven?
7 Satanás le dijo a El: "Si eres Hijo de Dios, bueno, haz un milagro aquí delante de mí. Déjame verlo". Uds. han oído que dicen eso. ¿Ven? Sólo recuerden, ese es el diablo. ¿Ven? Ese es él. ¿Ven? El dijo: "Si tú eres Hijo de Dios", dijo, "sólo-sólo haz un milagro y convierte este pan... estas-estas piedras en pan, y te creeré".
El dijo: "Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre".
Y luego en la cruz, satanás en aquellos sacerdotes dijeron: "Si eres Hijo de Dios, desciende de la cruz. Entonces te creeremos".
El lo podía haber hecho, pero El hubiera estado obedeciendo a satanás. ¿Ven? El no hace lo que satanás dice; El hace lo que Dios dice. Y cualquier siervo de Dios hace lo mismo: sólo es obediente. Así que, cuando Uds. oigan esas declaraciones, sólo recuerden de dónde provienen.
No-no desprecien a la gente, sino sientan lástima por ella, de que está en completa oscuridad y ceguera, quizás ordenada para esa condenación. ¿Qué entonces? Eso es malo, ¿no es así? Así que, sólo sentimos lástima y seguimos adelante, siendo humildes y siendo Cristianos.
8 Miren, esta noche yo les quiero hablar sobre un pequeño tema que tal vez es sólo hasta que tengamos a nuestra audiencia algo balanceada, y empiece a quitar todas las supersticiones, y....
Anoche, yo pensé que por ser la primera vez, fue bastante bueno ver a tantos responder al Espíritu Santo. Por supuesto yo pudiera haber contado cuando menos a doce aquí mismo que pensaron que era un engaño o algo así, pero uno va a tener eso de todas maneras, Uds. saben. Así que no permitan que eso interfiera con los que sí creen. Ellos no son creyentes, son incrédulos, y están en malas condiciones. Así que, sólo oren por ellos.
Pero ahora esta noche, yo quiero abordar el tema de Conferencias.
Ahora, yo quiero leer una Escritura que se encuentra en Isaías 1:18:
Venid luego, dice Jehová... estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.
Ese es un texto muy conocido del Evangelio. Quizás sus pastores lo han abordado muchas veces. Y yo pienso que es uno de los textos más sobresalientes, o compasivos, del Antiguo Testamento: Dios tratando de llevar a cabo una conferencia con el pueblo para estar a cuenta. Jehová Dios, quien creó los Cielos y la tierra y todas las criaturas que hay en ella, y sin embargo que pidiera tener una conferencia con el pueblo: "Estemos a cuenta, para ver qué es lo que resulta".
9 Oímos tanto últimamente tocante a conferencias. Ha habido tantas de ellas, y hay muchas conferencias que se están llevando a cabo por toda la nación y por todo el mundo. Yo estuve en Visalia, Illinois, hace unas cuantas semanas, o mejor dicho, Visalia, California, hace unas cuantas semanas, y estábamos en el edificio de la armería, algo como éste, o un poquito más grande.
10 Y la primera tarde, había tanta gente apiñada allí adentro, que antes que se oscureciera ellos ya habían devuelto como unos... varios cientos. Y a la siguiente noche había casi dos mil, así que no nos pudimos quedar allí más tiempo. Nos fuimos a los campamentos de feria de la ciudad vecina. Para las tres de esa misma tarde, había tantos allí, que tuvieron que cerrar las puertas y no permitirles entrar después de las tres de la tarde. Así que, sólo estaban apiñados.
11 Y ellos están planeando ahora construir un edificio grande en otra ciudad vecina para reuniones grandes, un auditorio municipal. Y no recuerdo cuántos millones de dólares costó, hasta, yo diría, quizás veinticinco, treinta millones de dólares. Y ellos dijeron, o lo anunciaron en la radio y en los periódicos, que dentro de dos años ellos de seguro pagarían el edificio, sólo rentándolo para llevar a cabo conferencias. Y siendo que ellos iban a tener ese grande lugar, que muchos clubes importantes, y los demás, que llevan a cabo sus conferencias, y logias y cosas así, ya les estaban tratando de dar fechas con años de anticipación, trayendo el dinero a la ciudad de la gente que vendría a la ciudad para estas conferencias, y reuniones y todo lo demás.
12 Nos damos cuenta que hay mucho de eso, de reunirse en estos últimos días, más de lo que solía ser. Y yo pienso que es tiempo que el pueblo de Dios se empiece a reunir más. "Venid, dice Jehová, y estemos a cuenta". ¿Ven?, yo pienso que es tiempo que las iglesias se reúnan, y que nuestras pequeñas diferencias sean rotas, y nuestras... que nos reunamos con... siendo uno. Jesús oró que fuéramos uno. "En esto conocerán todos que sois Mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros". Y es tiempo, creo yo, en este tiempo, que nos deberíamos estar reuniendo y llegando a ser más uno, porque no estamos divididos. Tenemos diferentes ideas, igual que las huellas digitales de nuestro dedo pulgar de nuestra mano no son iguales, y nuestros apetitos, tal vez, no serían iguales; pero sin embargo, en principios somos seres humanos. Y así es en el Cristianismo. Tenemos nuestras diferencias en nuestras organizaciones, pero sin embargo somos uno. Nosotros somos uno porque somos hijos de Dios, nacidos de Su Espíritu, lavados en Su Sangre.
13 Y eso es el porqué estamos aquí esta noche, estamos en una conferencia. Estas son conferencias en donde nos reunimos. Las hemos tenido en la nación, al alcance nacional. Aquí en la última guerra mundial, muchos de Uds. de mi edad y más jóvenes, pueden recordar la-la segunda guerra mundial, cuando ellos tuvieron las conferencias.
Nos preguntamos por qué las conferencias son... para qué son de todas maneras. Son para que ellos tomen a los más inteligentes del grupo, y los reúnan y traten de idear alguna estrategia para hacer algo. Ellas generalmente se llevan a cabo en un tiempo de crisis; es cuando llaman a conferencias, es en un tiempo de crisis. Sería un momento maravilloso tener una en la Iglesia universal del Dios Viviente, ¿no lo sería?, debido a la crisis que estamos confrontando: comunismo y todas las cosas, los ismos del mundo. La iglesia se está enfriando. Y es tiempo para que nosotros nos reunamos y estemos a cuenta, nos unamos en estas cosas.
14 Miren, ellos llamaron a una de las conferencias (de las conferencias mundiales), la de los Cuatro Grandes. Muchos de Uds. recuerdan eso, cuando los Cuarto Grandes poderes se reunieron. Nuestro amado Dwight Eisenhower, nuestro presidente, y también Churchill, y los otros grandes poderes del mundo en la llamada Conferencia de los Cuatro Grandes. Había una crisis aconteciendo. Las naciones estaban... Esto... las naciones amantes de la paz estaban en un tiempo de crisis, cuando Hitler y los Nazis y... estaban todos ya para sofocar al-al mundo. Y la gente temerosa de Dios, amante de la paz, y nuestra gran heredad, estaban en peligro. Por lo tanto ellos se reunieron para una conferencia.
15 Hubo la Conferencia de Ginebra. Todos podemos recordar la Conferencia de Ginebra, y también la Conferencia de Paris. Y de la manera que hacen eso, es que ellos ven que se está levantando una crisis, y luego ellos llaman a los mejores que ellos conocen, a los dirigentes de las naciones, para que se reúnan y discutan entre unos y otros, lo que ellos van a hacer. Ellos seleccionan un cierto lugar y... en alguna parte que inspire.
Y ellos llegan a ese lugar y hablan y unen sus ideas, de cómo ellos se pueden unir como un solo gran líder, como una sola gran nación, como un solo gran ejército, todos unidos para ser uno.
Eso sería lo que... Nosotros pudiéramos hacer una gran cosa, si toda la Iglesia redimida de Dios se pudiera unir y hacer esa misma cosa, todos deshacernos de nuestras propias ideas pequeñas y diferencias pequeñas que verdaderamente separan a la gente, y nos pudiéramos unir como una gran unidad de Dios. El comunismo huiría, los... todos los otros ismos huirían, cuando el gran ejército de Dios se llegara a reunir.
16 Miren, nos damos cuenta que en esos lugares de reunión, ellos tratan de encontrar un lugar que inspire. Yo estuve... Yo he estado en Ginebra, en donde ellos llevaron a cabo la Conferencia de Ginebra. Ciertamente es un lugar que inspira. Hay algo tocante a lugares en los que uno está, las condiciones alrededor de uno, que forman un ambiente, le ayuda a uno mucho.
17 Yo puedo pensar de los momentos más grandes de mi vida (yo soy una persona que ama lo inhabitado), que son cuando salgo a las montañas y observo la puesta del sol, escucho el llamado de los animales salvajes, oigo a los pájaros. Es inspirante, es algo que le hace algo a uno.
Entonces pudiéramos ir al lugar dónde podamos ser inspirados al reunirnos, los lugares de reunión. Algunos de nosotros nos ponemos fríos o un poco indiferentes, nos abstenemos de las reuniones de oración los miércoles en la noche, nos quedamos en casa para mirar algún cierto programa de televisión que no debería estar en la televisión. Y la gente se encapricha con eso, y se abstiene de la reunión de oración para mirar algún programa necio.
Entonces cuando nos reunimos en estos avivamientos, es para juntar nuestros dones y nuestros ministerios, para juntarlos para un avivamiento, para que traiga inspiración sobre la gente; para reunirnos para un surgimiento de un verdadero avivamiento, o ahora para la partida de la Iglesia al Hogar, pues estamos cerca del tiempo del fin.
Eso se sabe definitivamente, que estamos cerca del fin. Y ahora, mientras percibimos un sentir de las reuniones por una noche o dos mientras proseguimos, y vemos en cuál dirección el Espíritu Santo estará guiando, entraremos a ello, si es la voluntad del Señor.
18 Pero miren, la inspiración, son los lugares y condiciones en las que Uds. pueden entrar, pero... para ser inspirado. Yo, siendo un amante de lo inhabitado, me gusta subir las montañas y escuchar el llamado de lo salvaje. Y yo lo he amado desde que era un muchachito. No tanto para cazar el animal, sino sólo para estar en el bosque, porque hay algo allí que me inspira.
19 Hace unos cuantos años yo estaba en Colorado, en donde yo soy un guía en un rancho; he estado guiando gente por años. Y un día el ranchero y yo, fuimos allá tarde, después de que muchos de los... nosotros... que los que son llamados los "tipos" habían llegado, y obtuvieron su venado y demás, y se fueron, y entonces nosotros nos fuimos allá, muy alto en las montañas. Y allí es en donde yo tengo una pequeña conferencia privada con el Señor, cada vez que voy allá arriba. El siempre me muestra algo, o me acerca a El, cuando yo me alejo de todo.
Y ese año, la nieve había llegado un poco tarde y la manada de alces estaba en lo alto. Había nieve arriba, así que tuve que subir alto para encontrar los alces. Y una tarde allá arriba... Era como en los últimos de octubre. Los matorrales allá abajo estaban como "cohetes", muy quebradizos y secos. Y yo estaba arriba en la nieve. Y el clima puede cambiar muy rápidamente allá arriba. Puede estar un momento lloviendo, y luego nevando, y luego el sol brillando. Y surgió una tormenta, y yo me puse detrás de un árbol y recliné mi rifle, y esperé hasta que la tormenta pasó.
20 Y yo estaba allí al lado de un viejo derrumbe cerca del límite de la vegetación arbórea. Eso es tan alto como el pino crece, hasta que uno llega al pino pigmeo, y todo lo demás. Entonces cuando... Yo estaba asombrado de cómo... yo estaba sentado allí detrás de un árbol, oyendo los vientos soplar, y pensando del Señor, detrás de un pino grande. Y después de un rato la tormenta cesó. Yo me levanté, miré alrededor.
Y la manada grande de alces que yo estaba tratando de encontrar, se habían separado durante la tormenta, y yo podía oír a los grandes machos bramando. ¡Oh, hay algo tocante a ello que sencillamente aviva algo en uno, al oír a esos animales bramando! Yo los admiro mucho. Luego en la montaña oí a un lobo aullando, y a su compañera contestándole al pie de la montaña. Miré hacia el oeste y el sol se estaba ocultando, y pasando por las hendiduras de las montañas estaba el gran ojo mágico, parecía, de Dios, mirando a lo largo de las cumbres de las montañas, el horizonte azul; y viendo entonces dónde los vientos habían soplado y el agua se había congelado en las siemprevivas y había formado un arco iris que abarcó todo el cañón.
21 ¡Oh!, con todo eso junto, me eché a llorar como un bebé y empecé a llorar. Allí estaba El, Dios en el arco iris, el pacto; el aspecto era semejante a el Alfa y la Omega, jaspe y cornalina, ambos Rubén y Benjamín, el Primero y el Ultimo. Allí estaba El, aullando allí en el lobo; allí estaba El, bramando en el-el alce. Para todas partes que Ud. mira allá arriba, parece ser Dios.
De esa manera me gusta recibir esa inspiración. Subir allá, solo con Dios, estando millas y millas y millas de alto; me tomaba un par de días para bajar de donde estaba, hasta donde estaban los caballos amarrados. ¡Pero estar allá arriba solo con Dios! Dormí allá arriba esa noche en la montañas.
22 Y mientras estábamos allá arriba, yo recibí una clase de ese espíritu verdadero de regocijo sobre mí. Me imagino que eso no es extraño para Uds. gente Pentecostal. Y me puse tan contento que recliné el rifle contra el árbol y empecé a correr alrededor y alrededor del árbol, sólo saltando tan alto como podía, gritando a voz en cuello: "¡Alabado sea el Señor!, ¡alabado sea el Señor!" Y me imagino que si alguien hubiera llegado al bosque, hubiera pensado que había alguien allí que se había escapado de un manicomio.
Alrededor y alrededor del árbol yo corrí, tan rápido como podía correr, gritando y pateando las hojas del pino. Yo tenía que dejar escapar la presión en alguna parte, o hubiera estallado. Yo estaba... Yo sólo estaba disfrutando de unos momentos maravillosos, porque yo estaba allí justo en la Presencia de Dios, teniendo una conferencia con El, sólo diciendo: "¡Cuán grande eres Tú, cuán grande eres Tú!
23 "Allí estás Tú, por todas partes. Tú estás allí en los cielos, en el ojo mágico del sol, recorriendo la tierra. Allí estás Tú en el arco iris. Allí estás Tú en el lobo. Allí estás Tú en el alce. Allí estás Tú en los vientos, oyéndolos soplar a través de esos pinos como diciendo: 'Adán, ¿dónde estás?'", ¿ven?, moviéndose alrededor. Inspiración, teniendo una conferencia verdadera y genuina con Dios.
Y de repente yo fui interrumpido. Y no me gusta ser interrumpido en esa clase de momentos. Así que, a mí me gusta gritarlo hasta que estoy-estoy todo satisfecho. Luego miré y allí estaba una pequeña ardilla. Oh, ella es una pequeña bribona, como así de grande; es el policía de saco azul de los bosques. Y ella asusta todo en la región. Y todos ellos están atentos a ella, porque ella siempre está lista para hacer: "Chátara, chátara", a algo. Ella subió de un salto a un tronco viejo o leño allí, me miró y empezó a ladrar tan fuerte como podía: "Chátara, chátara, chátara, chátara".
24 Y yo pensé: "Bueno, ¿qué le pasa a la ardillita?" Yo dije: "¿No te gusta eso?" Yo dije: "Fíjate bien en esto entonces". Y corrí alrededor y alrededor y alrededor y alrededor del árbol otra vez. Y ella continuó ladrando más. Yo dije: "Yo estoy alabando a mi Creador, ardillita". Yo dije: "Estoy disfrutando de unos buenos momentos con El. Estamos llevando a cabo una conferencia aquí. Yo le dije que yo estaba vacío, y El me está llenando, ¿ves? Así es cómo lo hago". Y corrí alrededor y alrededor y alrededor del árbol otra vez.
Y sucedió que me fijé que la ardillita no me estaba poniendo mucha atención, mientras continuaba ladeando su cabecita de lado a lado, casi con sus ojitos saltados en la mejilla, mirando hacia abajo de esta manera. Bueno, yo me detuve, y pensé: "¿Qué es lo que me está interrumpiendo ahora?" Y miré hacia abajo en ese lugar donde había arboles tumbados. Y la tormenta había forzado a una águila grande a bajar a la maleza donde los árboles estaban tirados unos encima de los otros pues años antes una tormenta los había tumbado. Y ella estaba chirriando, o estaba armando un escándalo por causa de esa águila. Y el águila grande estaba saliendo de debajo de esa maleza. Y me miró, y subió de un salto a un madero.
25 Y yo pensé: "Bueno, mira, ¿qué es lo que es tan piadoso tocante a ti?" Y yo la miré así, y pensé: "Bueno, Dios, ¿por qué me detuviste en los gritos y en la adoración a Ti, sólo para mirar a esa águila?" Bueno, un águila... Dios mismo Se compara a un águila, y El llama a Sus profetas águilas, porque el águila puede volar más alto que cualquier otra ave que hay. No hay nada que la pueda seguir. Si un halcón la tratara de seguir, se desintegraría en el aire. Eso es correcto.
Ella... Bueno, ella tiene un ojo que puede ver después de que llega allá arriba. Esa es la razón que yo digo que cualquiera que esté brincando, que brinque sólo tan alto como pueda vivir, Ud. sabe. Eso es todo. Porque, ¿qué bien le hace a Ud. llegar allá arriba, si no puede ver algo mientras esté Ud. allá arriba? No le sirve para nada. Así que, ella-ella llega allá, y tiene un ojo que puede ver cosas que están lejos, antes que lleguen aquí. Y esa es la razón que Dios compara a las águilas con Sus profetas, o mejor dicho, Sus profetas a las águilas; y El mismo se llama Jehová Aguila; y así que, nosotros somos aguiluchos.
26 Miren, hay mucha diferencia entre un águila y una gallina. Ambas son aves, pero una de ellas está apegada a la tierra, y la otra está apegada al cielo. Así que, hay mucha diferencia, únicamente son primos o algo. Así que, si la gallina no puede despegar sus pies de la tierra, no se preocupen; ella sólo es una gallina para empezar, Uds. saben. Ella nunca subirá allá y sabrá lo que un águila sabe, que puede volar allá arriba en lo celeste.
Así que, yo observé a esa águila mientras estaba allí, observándome con sus grandes ojos que se miraban grises. Y yo pensé: "Bueno, hay una cosa que admiro de ella: no tiene miedo". Y yo-yo odio a un cobarde, así que... Dios también lo odia. Así que, un hombre que tiene miedo después que ha sido sanado que testifique al respecto, un hombre que Dios ha salvado y luego él se avergüenza de decir a alguien que ha sido salvado y llenado con el Espíritu Santo, yo no tengo mucha confianza en su salvación. Así que, cuando Ud. verdaderamente la recibe, le quiere decir a todos. Ud. sencillamente no se puede mantener quieto. Lo que la iglesia necesita es más del Espíritu Santo y fuego en ella que la mueva, que mueva a la iglesia. Se requiere fuego para mover a la iglesia.
27 Así que, esa águila, yo la observé por unos cuantos momentos, y después de un rato, después que ella vio que yo la estaba admirando, le dije: "Oye, ¿sabes que yo te pudiera disparar antes que tú te eleves de ese leño?", sólo para ver-ver-ver si me tenía miedo. Ella no tenía miedo; sólo estaba allí. Y me fijé... "¿Qué es lo que te hace que te sientas tan segura de ti misma?" Yo me fijé que continuaba moviendo sus alas, sólo sintiendo para ver si todas las plumas estaban en buenas condiciones. Porque ella tenía mucha confianza en esas alas, y ella sabía que podía estar en aquel bosque antes que aun yo pusiera mi mano en ese rifle. Y allí recibí una lección. Yo pensé: "Aquí en esta conferencia, yo estoy aprendiendo algo", ¿ven?
28 Miren, esa águila tenía dos alas que Dios le había dado y ella tenía confianza en esas alas. Ella sabía lo que podía hacer con esas alas, y no tenía miedo de mí en lo absoluto. Así que ella sabía que podía estar en aquel bosque antes que aun yo pusiera mi mano en el rifle.
29 Y yo pensé: "Si esa águila, con-con las dos alas que Dios le dio, sabía que podía escapar allá antes que yo pudiera hacer algo al respecto, ¿qué le debería hacer a un Cristiano que ha recibido el Espíritu Santo?" Mientras Ud. pueda sentir Su Presencia alrededor de Ud. y que todo esté funcionando en orden ("... ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu"), cuando Ud. sienta esa condición funcionando en orden, no se preocupe tocante a lo que satanás va a hacer. Sólo... Ud. sabe que está en buena condición entonces.
Así que, yo la observé de esa manera. Y me vine a dar cuenta que ella no tenía miedo de mí, sino que sencillamente no le gustaba oír a ese ardillita, esa ardillita de pino, sentada allá haciendo: "Chátara, chátara, chátara. Chátara, chátara, chátara", como que si la iba a despedazar. Bueno, ella no iba a hacer nada, pues era muy pequeña. El águila la pudiera haber levantado, y eso hubiera sido... Bueno, sus garras eran más grandes que la ardilla. Bueno, pero la ardillita estaba dando saltos como si ella la iba a despedazar, sólo fanfarroneando de ello, Uds. saben.
30 Finalmente el águila se hartó de ello. Así que sólo dio un gran salto y aleteó como dos veces, y luego posicionó sus alas. Y yo me quedé allí y observé esa águila hasta que lloré. Ella no aleteó, y aleteó, y aleteó, y aleteó. Ella sólo aleteó un par de veces, hasta que subió por arriba de los límites de la vegetación arbórea, y luego ella sólo supo cómo posicionar su alas en esas ondas de aire que subían la montaña; y se la llevaron subiendo, subiendo, subiendo, al grado que llegó a ser sólo un puntito. Y nunca movió ni una pluma; ella sólo sabía qué hacer.
Y yo pensé: "¡Eso es! No es unirse a la Metodista, luego unirse a la Bautista, y luego unirse a las Asambleas, luego unirse a la Iglesia de Dios. No es aletear, aletear por aquí, y aletear, aletear por allá. Sólo es saber cómo posicionar sus alas de fe en el poder de Dios, y cuando la gloria llegue, sólo suba con Ella, y suban, y suban".
Aléjense de esas ardillitas listadas apegadas a la tierra, diciendo: "Chátara, chátara, los días de los milagros ya pasaron; no hay tal cosa como sanidad Divina; ya no hay más Espíritu Santo. Sólo fue para los apóstoles, hace mucho tiempo". Sólo posicionen sus alas y aléjense volando, subiendo, subiendo, subiendo, subiendo, hasta que no la pueda oír más. Esa es la clase de conferencia que queremos con Dios, que nos levante por encima de las sombras, nos aparte a tal grado que todo el criticismo y todo, y Uds. ya no lo puedan oír más; sólo estar encerrados con Dios. Uds. no tienen que unirse a esta, unirse a esa. Sólo sepan cómo posicionar su fe.
31 Correcto. Sólo posicionen su fe en la Palabra de Dios. Y cuando ese Antiguo y Nuevo Testamento se disemine allá, que El es el mismo ayer, hoy, y por los siglos, y cuando el poder de Dios llegue cabalgando, cabalguen con él. Sólo suban, suban, suban, suban, suban todo el trayecto. El es el mismo ayer, hoy, y por los siglos. El no puede fallar.
Oh, estas conferencias, deberían ser consideradas con mucha oración por todos nosotros. No deberíamos sólo permitir que se lleve a cabo una y luego no orar por ella, por ambas, la de orden nacional y en la iglesia, y lo que pudiera ser. Nosotros siempre deberíamos orar.
32 Un ministro amigo mío, un buen hermano Cristiano, en... durante la Conferencia de Ginebra, él estaba esperando junto a su radio para oír los informes de ello, porque nuestra nación estaba en peligro, y nuestra gran heredad por la que nuestros antecesores pelearon estaba en peligro. Y él era un hombre piadoso, bueno, y justo. El estaba allí escuchando.
Alguien tocó en su puerta, un moderno beatnik, con su barba, sucio. ¡Cómo fue que los niños americanos pudieron aceptar tal cosa como esa, y luego salir allí! Tocó en la puerta, y él dijo: "Señor, yo estoy aquí para vender algo de mi poesía y mis canciones", él dijo, "y ellos no me oyen". Y dijo: "No me dan una-una audiencia. Y me dicen que Ud. es uno de influencia... un hombre influyente en la ciudad".
El dijo: "Buen hombre, pasa y siéntate sólo un momento. Yo estoy escuchando esos informes". Pero, ¡oh, él no se quiso esperar quieto! No, señor. Aquello era más importante que el resultado de la nación.
33 Y de esa manera muchos miembros de iglesia se ponen hoy: esas cositas de fandango que suceden entre la gente, son más importantes que la verdadera Iglesia del Dios Viviente. Olvidemos nuestras cositas y alejémonos volando. Escuchemos los informes.
34 Miren, aquí ellos tuvieron otra conferencia de la cual me gustaría hablar sólo un momento: la última conferencia que ellos tuvieron en el edificio de la O.N.U., en donde el este y el oeste se reunieron, en donde Khrushchev se quitó su zapato y golpeó el escritorio con él. Eisenhower y Khrushchev se encontraron, Eisenhower representó al mundo libre, y Khrushchev, al mundo oriental comunista. Y eso se les pasó por encima de la cabeza de mucha gente, que no oró tocante a ello.
Pero si Uds. por casualidad se dieron cuenta, eso fue una respuesta directa y una profecía directa cumplida en ese entonces. Fue una profecía directa. El este y el oeste habían cumplido exactamente lo que Daniel dijo, que diez reinos, que habría... no se mezclarían, como el hierro y el barro no se mezclarían. Y la palabra Khrushchev en ruso, significa: "barro"; la palabra Eisenhower en inglés, significa: "hierro"; y el hierro y el barro no pudieran unirse.
35 Oh, a medida que vemos esas cosas aproximándose, deberíamos estar en nuestras rodillas, clamando: "¡Oh, Señor Jesús, haz algo por nosotros rápidamente, para que podamos tratar de traer la última persona que la podamos traer dentro del Reino de Dios!"; reuniéndonos y teniendo conferencias y reuniones, y reunirnos en reuniones de oración de toda la noche. El problema con la iglesia esta noche, es que vamos y nos arrodillamos, y oramos y bostezamos unas cuantas veces, tan adormecidos y cansados, y nos queremos ir a casa para acostarnos.
36 No es como la Iglesia temprana de Pentecostés. Ellos oraban todo el día y toda la noche. Yo conocí a esos antiguos de hace cuarenta años. Dijeron que ellos oraban todo el día y toda la noche, caminando en las calles. Hoy día llegamos a ser clásicos y nos queremos comparar con las grandes iglesias, y allí es donde cometemos nuestros errores. Déjenme decirles, la iglesia estaba en mejor condición hace cuarenta años para la Venida del Señor que lo que está esta noche, porque somos la iglesia de Laodicea. Comprendemos que esa es la edad en la que estamos viviendo. Y esa fue la única iglesia en la que Jesús fue encontrado fuera de Su propia iglesia, tocando a la puerta, tratando en entrar de nuevo en Su propia iglesia.
37 Nuestras diferencias lo han rechazado a El, nuestra separación de la hermandad, y la manera que hemos ido tras las cosas del mundo en lugar de las cosas de Dios. Deberíamos haber estado ya dentro de la tierra de Canaán, y aquí estamos en el desierto, vagando, dando vueltas y vueltas otra vez, igual que ellos lo hicieron allá en el pasado. Deberíamos estar teniendo toda clase de dones, señales y prodigios en nuestras iglesias. En lugar de eso, Dios puede levantar algo, y luego todos nosotros nos asustamos de ello y nos alejamos, y decimos que no entendemos estas cosas.
¿Qué piensan Uds. que ellos hicieron en ese desierto por cuarenta años, dando vueltas y vueltas en los mismos terrenos antiguos? Hemos tomado Hechos 2:4, Hechos 2:4, Hechos 2:4; lo hemos usado demasiado. ¡Pero sigamos adelante! La tierra prometida está allí. "Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá". Hechos 2:4 está correcto, pero eso no es todo ello. Correcto. Hay más de ello. Eso es... toda promesa en la Biblia es nuestra. Se nos ha dado a nosotros por medio del Señor Jesús, y Su gran mano poderosa está deteniendo el tiempo para que nosotros poseamos la Tierra que se nos ha dado a nosotros. Seguro que sí.
38 Conferencias. ¡Oh!, cuando el mundo tiene una conferencia y ellos se reúnen, ¿qué hacen ellos? Por lo general tienen whisky y cócteles, y beben, y mienten, y se defraudan y se engañan uno al otro, haciendo toda clase de diferentes planes y todo lo demás, y con un cuchillo detrás de ellos, como la Biblia dijo que ellos lo harían.
39 Pero, ¿qué sucede cuando Dios tiene una conferencia? Los hombres ayunan y oran y esperan órdenes, y luego se ponen en marcha. Nosotros hemos estado hablando ahora tocante a conferencias mundiales, conferencias nacionales. Hay muchas de ellas de las que pudiéramos pensar, pero pensemos de algunas conferencias que Dios tuvo. Llamemos algunas de esas a memoria.
Pensemos de la primera conferencia que Dios alguna vez tuvo cuando surgió la primera emergencia. La llamaremos la Conferencia del Edén. Esa fue la primera emergencia, cuando el anuncio llegó al Cielo que el hijo de Dios y Su hija, Sus hijos que El puso en el Edén, habían perdido su lugar en gracia, y se habían apartado de Dios, y estaban descarriados y desnudos. El Cielo no lo podía detener más tiempo a El. El descendió a la tierra, caminando de un extremo al otro por todo el huerto, llamando: "¡Adán, Adán!, ¿dónde estás?"
40 El hombre verdaderamente expresó en ese instante de lo que estaba hecho. En lugar de salir a encontrar a Dios y decir: "¡Yo estoy mal, Padre, yo hice mal!", él se escondió y él mismo se envolvió con algunas hojas de higuera. Eso es lo que el hombre trata de hacer hoy día. En lugar de salir y decir que él es un incrédulo, él trata de decir: "Yo soy un Presbiteriano, un Bautista, un Metodista, un Luterano", o algo más. En lugar de envolverse él mismo en la justicia de Dios, y confesar sus pecados, que él está mal y que es un incrédulo, él se trata de esconder detrás de alguna teología de iglesia. Sal de detrás de eso, Adán, incrédulo. Fíjense. Pero eso es lo que él hace.
Y fíjense, Dios nunca envió un Angel aquí para encontrar a Su hijo; El mismo vino. Eso fue el verdadero... La razón que yo pienso hoy... que hoy día, cuando ellos tratan en este día de religión moderna, este día cuando la religión social está dominando el país, entrando sigilosamente en todas las diferentes denominaciones... Ellos tratan de quitar la Divinidad de Jesucristo y hacerlo a El sólo un hombre.
41 No hace mucho tiempo yo le estaba hablando a una mujer. Ella dijo: "Yo aprecio sus mensajes, Hermano Branham, pero Ud. pone demasiado énfasis en Jesús. Ud. alardea demasiado de El".
Yo dije: "Si yo tuviera diez millones de lenguas, yo no pudiera alardear lo suficiente de El". Yo dije: "El es digno de todo lo que yo pudiera alardear tocante a El".
Ella dijo: "Bueno, hay una cosa: Ud. lo trata de hacer Divino".
Yo dije: "El sí era Divino".
"Oh", ella dijo: "El solamente era un hombre. El era un buen hombre".
Ellos no creen en Su Sangre expiatoria. Escuchen: si esa fue la sangre de un judío o de un gentil, todos estamos perdidos. Esa fue la Sangre de Dios mismo. El no era ni judío ni gentil: El era Dios manifestado en la carne. Eso es exactamente correcto.
42 ¿Qué sucedió? La sangre proviene del sexo masculino. Sabemos eso. Una gallina puede poner un huevo, pero si ella no ha estado con el ave macho, nunca empollará. No es fértil. El bebé que nace de una mujer está envuelto en la sangre de ella, pero él no tiene ni una sola pizca de la sangre de ella. La hemoglobina está en el sexo masculino. Así que nosotros podemos....
Por ejemplo, se aproxima la primavera. Nos fijamos que las madres pájaras salen y les hacen un nido, ponen un nido lleno de huevos. Y ella se puede subir a ese nido y empollar esos huevos al grado que ella esté tan débil que no pueda volar del nido, tan reverente y tan respetuosa con sus huevos. Ella los voltea de esta manera, y los voltea de la otra manera. Ella se está muriendo de hambre, pero ella tiene miedo que ellos... que ellos estarán expuestos si ella vuela del nido. Ella es una madre fiel, y trata de empollar esos huevos. Pero si ese macho... esa ave hembra que puso los huevos, si ella no ha estado con el ave macho, el compañero, no importa cuánto ella empolle esos huevos, qué tan bien ella los trate, ellos se pudrirán en el nido. Eso es exactamente correcto.
43 Ese es el problema con muchas de nuestras iglesias frías y formales de hoy día. Ellas tienen un nido lleno de huevos podridos. Unicamente profesan, y nunca han estado con el Compañero, Jesucristo. La única cosa por hacer, es limpiarlo, y empezar otra vez con hombres y mujeres que han estado en contacto con el Compañero, Jesucristo, con Su Iglesia.
¿Cómo pueden ellos creer el poder sobrenatural de Dios, cuando ellos no tienen nada con que creer? Mi anciana mami sureña me decía, decía: "Cariño, tú no puedes obtener sangre de un nabo, porque no hay sangre en él". ¿Cómo pueden Uds. obtener fe de una persona que no tiene nada con qué tener fe? Si Uds. nunca han nacido de nuevo del Espíritu de Dios, Uds. no conocen los primeros principios del poder de la resurrección de nuestro Señor Jesucristo. Eso es correcto. Ellos no lo entienden. Oh, los tenemos, y ellos aportan grandes sumas en la iglesia, y los hacemos diáconos y todo lo demás, y los empollamos, y ellos sólo son incrédulos para empezar.
Miren, ¡cuánta verdad es eso!, ver el tiempo de la unión con el compañero. El compañero... Ahorita debería ser el tiempo de la unión con el Compañero, cuando la Iglesia se pone en contacto con Cristo, y recibe verdadera y genuina fe del Espíritu Santo.
44 Y esa señora me dijo, ella dijo: "Hermano Branham, Ud. me dijo que era un fundamentalista, que Ud. sólo hablaba lo que la Escritura decía y se quedaba con Ella".
Yo dije: "Sí me quedo".
Y ella dijo: "Yo le puedo probar a Ud. que El no era Divino".
Yo dije: "Si El fue algo menos que Dios, El fue el engañador más grande que el mundo alguna vez tuvo". Yo dije: "El Espíritu Santo, Dios, le hizo sombra a la virgen y creó una célula de Sangre en la matriz. Esa célula de Sangre era el Hijo de Dios. Por medio de esa Sangre nosotros recibimos perdón de pecados. El hombre no sabía nada tocante a esa mujer. Ella dijo: 'Yo no conozco varón'. Y ese era Dios mismo tabernaculizándose en el hombre, Dios mismo".
Ella dijo: "Y Ud. lo hace Divino".
Yo dije: "El sí era Divino".
Ella dijo: "Yo se lo probaré por su propia Biblia que El no era Divino".
Yo dije: "Permítame oírla a Ud. decirlo".
Ella dijo: "En San Juan, el capítulo 11, cuando Jesús fue al sepulcro de Lázaro, la Biblia dice que 'El lloró'. Y si El era Divino, El no podía llorar".
"¡Oh!", yo dije: "Señora, eso está más diluido que un consomé hecho de la sombra de una gallina que está muerta de hambre". Yo dije: "¿Cómo pudiera Ud. basar cualquier teología sobre eso?" Yo dije: "El era ambos, hombre y Dios". "A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo que está en el seno del Padre, El le ha dado a conocer". "Dios estaba en Cristo reconciliando Consigo al mundo". Exactamente correcto.
45 Yo dije: "Es verdad, que cuando El fue al sepulcro de Lázaro, lloró como un hombre; pero cuando El enderezó esos hombritos, miró allí y dijo: '¡Lázaro, sal fuera!', y un hombre que había estado muerto por cuatro días se puso de pie y vivió otra vez, Ese era más que un hombre. Ese era Dios hablando por medio de Su Hijo. Correcto. Era Dios en El". El era un hombre cuando El descendió del monte esa noche con hambre, buscando algo para comer en un árbol; El era un hombre cuando El tenía hambre, pero cuando El tomó cinco panecillos y dos peces y alimentó a cinco mil personas, Ese era más que un hombre. Ese era Dios quién podía crear. No otro pez, sino un pez cocinado; no más trigo, sino pan cocinado. El era Dios el Creador.
46 El era un hombre recostado allí en la parte de atrás de esa barca aquella noche cuando los diablos juraron que lo ahogarían; tal vez diez mil diablos del mar dijeron: "Está dormido ahora y lo podemos ahogar". La pequeña barca era arrojada de un lado al otro como un corcho de botella allá en la tormenta. Ellos pensaron: "¡Ahora lo tenemos!" El era un hombre cuando El estaba dormido, cansado, y agotado debido a Su servicio; pero cuando El puso Su pie sobre la cargadera de la barca y miró hacia arriba y dijo: "¡Calla, enmudece!", y los vientos y las olas lo obedecieron, Ese era más que un hombre.
Cuando El murió en la cruz, El clamó como un hombre: "¡Dios mío, ten misericordia! ¡Dios mío, Dios mío!, ¿por qué me has desamparado?" El era un hombre en Su muerte; pero en la mañana de Pascua, cuando El rompió el sello de la muerte, el infierno, y el sepulcro, y se levantó otra vez....
¡Oh!, ha inspirado a todo poeta o escritor de alabanzas que alguna vez existió. Todo hombre que alguna vez logró algo, creyó que El era Divino. Ha inspirado poetas y profetas a través de los años. Uno...?... Uno escribió un poema, dijo esto:
Cuando yo examino la maravillosa cruz
Donde el Príncipe de Gloria murió,
Yo considero toda mi fama como una pérdida.
47 Eddie Perronett dijo:
¡Toda aclamación al poder del Nombre de Jesús!
Que los Angeles se postren;
Traed la diadema real,
Y corónenlo a El Señor de todo.
Otro... La ciega Fanny Crosby dijo:
¡No pases de mí, oh, bondadoso Salvador,
Oye mi humilde clamor!
Mientras a otros Tú estás llamando,
No pases Tú de mí.
Tú eres el torrente de todo mi bienestar,
Más que vida para mí;
¿A quién tengo yo en la tierra aparte de Ti?
O, ¿a quién en el Cielo sino a Ti?
Otro escribió esto:
Viviendo, El me amó; muriendo, El me salvó;
Sepultado, El llevó mis pecados muy lejos;
Resucitando, El me justificó gratuitamente para
siempre.
Algún día El viene, ¡oh, glorioso día!

Todo hombre que creyó que El era Divino... Seguro que sí.
48 ¡Oh!, cuando Dios tuvo una conferencia en el Edén, Su hijo estaba perdido, Sus hijos estaban perdidos. Esa es la razón que El nunca confió la redención a ningún Angel o a nadie más sino a Sí mismo. Nosotros fuimos redimidos por la Sangre de Dios. Y miren, esa célula de Sangre, es lo que nos da confianza para pararnos firmes en Su Palabra. Eso es lo que nos da confianza para caminar frente a demonios y la oposición, es porque sabemos que venimos cubiertos con la Sangre del Señor Jesús, lo cual hay poderes Divinos en la Sangre de Jesucristo.
Miren, fíjense bien en El. Vemos en esta conferencia a Dios caminando por el huerto del Edén. Hay algo que se tiene que hacer; hay una emergencia aconteciendo. Sus hijos están perdidos; él no sabe qué hacer. Desciende al huerto y los empieza a buscar. Cuando El los encontró allí adentro, escondidos, detrás de alguna clase de credo hecho por el hombre, ¿qué hizo El? El seleccionó un cierto árbol y los llamó a salir. Y El tuvo una conferencia, y allí se hizo una decisión: cómo es que se debe redimir al hombre. Y el hombre ha funcionado con hojas de higuera desde entonces; pero Dios nunca ha reconocido nada sino la sangre con la que El empezó en el principio.
49 Todo hombre y mujer por todas las edades, todo profeta, toda persona, siempre ha acudido a estos principios. Job se paró firme en ello. El único lugar de reunión para Israel, era bajo la sangre derramada. El único lugar en el que caía la Gloria Shekinah [Chequina-Trad.], era bajo la sangre derramada. El único lugar al que irá la Gloria Shekinah (espero no herir sus sentimientos, Bautistas, Presbiterianos), pero el único lugar en el que cae la Gloria Shekinah, es bajo la Sangre. Esa es la razón que Uds. sienten esta Gloria Shekinah de Pentecostés, es porque están bajo la Sangre, la Sangre derramada del Hijo de Dios. Allá dentro de la Gloria Shekinah, cuando El tomó Su propia Sangre y rasgó el velo en dos, y entramos en la Presencia de Dios, la Gloria Shekinah, donde están Sus bendiciones. ¡Oh!, hace hombres nuevos de hombres viejos.
50 Aarón dejó su vara allí un año, y floreció y brotó mientras estaba en la Presencia de la Gloria Shekinah. Todo hombre que está en la Presencia de la Gloria Shekinah de Dios... tomará a un pecador muerto, muerto en pecados y delitos, y lo hace florecer para llegar a ser una nueva criatura en Cristo Jesús.
51 ¡Una conferencia! ¡Una conferencia! Dios hizo Su decisión. Por esa razón es que nosotros la llamaremos eso, La conferencia del Edén. (Uds. saben, el tiempo pasa muy rápido. ¿Ven?, uno ni siquiera ha empezado, cuando ya es tiempo de parar). La Gloria Shekinah en la Conferencia del Edén.
Miren, hubo otra conferencia. Refirámonos rápidamente a dos o tres más, por favor. Hubo otra conferencia. Llamémosla "La conferencia de la zarza ardiendo". Hubo un hombre que huyó en una ocasión; Dios tenía un profeta fugitivo. Se fue y se casó, y tuvo un niñito llamado Gersón. Su nombre era Moisés. Así que él iba a heredar todos los rebaños de Jetro, y le estaba yendo muy bien, mientras estaba al pie del monte una mañana. Oh, él ya se había olvidado de la carga del pueblo allá en Egipto, porque estaba muy bien establecido.
52 Yo pienso que esa es la misma condición a la que ha llegado la iglesia Pentecostal, que se olvidó acerca de la carga por esos pecadores. No es únicamente la iglesia Pentecostal, sino la Metodista, la Bautista, la Presbiteriana. En lugar de traerlos de nuevo a Dios... Y cualquier hombre, a mí no me importa qué tan teólogo sea Ud., o a qué iglesia pertenezca Ud.... Hubo una sola Iglesia, y todo Cristianismo empezó en el Día de Pentecostés con una experiencia Pentecostés. La iglesia Católica dice que aquélla eran ellos. Todos se tratan de referir a eso. Pero si eran ellos, ¿por qué no están siguiendo la misma gloria y las mismas señales de esa iglesia como fue en aquel entonces? Seguro.
53 Miren, hubo una conferencia. Dios vio a Su profeta fugitivo; y cuando Dios escoge a un hombre que haga una cosa, no hay manera que él se escape de ello. Dios lo persigue. Quizás algunos de Uds. aquí esta noche están descarriados; Uds. serán miserables todos los días de su vida (y Uds. deberían estar), hasta que se rindan a Dios. Ahí estaba él.
Algunas de Uds. mujeres, algunos de Uds. hombres, regresan al mundo, van a bailes y cosas que Uds. fueron enseñados a no asistir. Hoy día es una vergüenza a lo que nuestras iglesias Pentecostales han llegado. Como David duPlessis dijo hace tiempo, acerca de adonde hemos llegado. Uds. saben, nuestra iglesia Pentecostal es igual a nuestra iglesia Metodista (en cuyo edificio estamos esta noche), igual a la iglesia Bautista, a la Presbiteriana. Si el Metodismo volviera a las enseñanzas de Wesley, estaría bien. Seguro. Si los Bautistas volvieran a John Smith, si los Luteranos volvieran a Martín Lutero, y si los Pentecostales volvieran a Pentecostés, (correcto), estarían bien.
54 Empezó bien, pero la cosa de ello, es que adoptamos nietos. Dios no tiene nietos. El no tiene nietos; El sólo tiene hijos. Traemos a nuestros hijos y los inscribimos en el registro de los recién nacidos, como Metodistas y Bautistas y todos los demás. Ellos entran en la iglesia, y los recibimos como Pentecostales, y no saben más tocante a Dios que lo que sabe un conejo tocante a los zapatos para la nieve. Lo que necesitamos hoy día es volver a la experiencia de Dios, y volver al Espíritu Santo otra vez. Eso es correcto.
Miren, perdonen esa expresión. Suena sacrílega. Yo no la quise decir exactamente de esa manera. Pero esa es la verdad. Correcto. Tenemos que volver a... Dios no tiene nietos. El tiene hijos, pero no nietos. No hay lugar en la Biblia en donde Dios tuvo nietos. Toda persona debe venir y pagar el mismo precio, debe venir de la misma manera. Dios únicamente tiene una sola manera, y esa es a través de Jesús, y Ud. tiene que venir de esa manera. Sin eso, no hay manera de llegar a El.
55 Miren, nos damos cuenta que Moisés estaba bastante satisfecho. Todo le estaba yendo bien, y él había perdido toda la carga por el pueblo que estaba allá en esclavitud. Y un día Dios decidió llamarlo. Y así que El seleccionó un lugar, un cierto árbol.
Y adonde Dios desciende, hay... de una u otra manera siempre hay mucho fuego donde está Dios. Si Ud. está en donde está Dios, hay mucho ruido y mucho fuego. Yo no sé por qué, pero siempre ha sido de esa manera. Eso es Escritural. Sí, señor, siempre hay mucho fuego. Y se necesita fuego para hacer mover a la Iglesia de todas maneras. Uno nunca lo logrará. Uno nunca los vestirá con hojas de higuera. Uno nunca los vestirá con hojas de higuera Pentecostal. Ellos tienen que regresar al fuego. Eso es correcto.
56 Una vez mi hermano y yo, cuando éramos niños, íbamos caminando y vimos una tortuga. Pensamos que era la criatura más risible que jamás habíamos visto, de la manera que ella movía sus pies al caminar. Uds. gente de Illinois saben qué son las tortugas. Y ahí venía caminando. Yo dije: "¿No se mira risible, hermano?" Nos acercamos.
57 Me recuerda a mucha gente, cuando uno los "pisa" con el Evangelio, Uds. saben. Ellos hacen: "Chiu", se meten en su concha, Uds. saben. "Yo soy Fulano de tal. Yo pertenezco a esta organización". Eso no tiene nada que ver con ello. Correcto. "Yo pertenezco a tal y tal". Bueno, a mí me daría vergüenza admitir eso. Pudiera haber perdón por ello; si realmente trata con todo lo que tiene para arrepentirse, Ud. pudiera ser perdonado por ello. Dios no reconoce ninguna organización. El reconoce la Sangre de Su propio Hijo, Jesucristo. Eso es todo. "Y veré la Sangre y pasaré de vosotros".
Ese niño y yo estábamos allá, y esa tortuga. Yo dije: "¿Sabes qué voy a hacer? La voy a hacer que salga de allí". Fui y me conseguí una vara y la azoté. Eso no sirvió para nada. Ud. no los puede meter azotándolos. Ahí termina la cosa. Ud. no los puede hacer volver azotándolos. Eso es correcto. Yo lo he tratado por diez años y no lo puedo hacer. Ud. sencillamente no los puede hacer que vuelvan azotándolos.
58 Así que yo dije: "Yo te diré lo que voy a hacer. La voy a arreglar". Había un arroyo corriendo por allí, así que fui allá y la zambullí en el agua. Sólo unas cuantas burbujas salieron y eso fue todo lo que hubo. Y hermano, Ud. los puede bautizar con la cara hacia enfrente, hacia atrás, tres veces, cinco veces. No sirve para nada. Sólo unas cuantas burbujas salen y eso es todo lo que queda. ¿Es correcto eso? O: "Bendito Dios, yo les dije a Uds. que lo haría". Ahí termina toda la cosa.
¿Saben Uds. cómo finalmente la hice que se moviera? Hice una fogata y la puse encima de ella. Ella sí se movió entonces. Lo que la iglesia necesita es otro fuego de Pentecostés, el Espíritu Santo, para hacer que la iglesia vuelva a entrar en los arreos de Dios, volver a los arreos.
A Dios no le importa a qué organización Ud. pertenezca. El está en contra de todas ellas de todas maneras, así que cuando... Bueno, eso es verdad. Yo lo puedo probar por medio de la Escritura. Los Católicos fueron la primera organización, la cual fue una prostituta, y ella tuvo hijas. Miren, Uds. lo pueden elaborar de cualquier manera....
59 Cualquiera que alguna vez lea El concilio de Nicea, Los padres prenicenos, cualquiera, Uds. verán adónde llegó; primero fueron los hechos de los Nicolaítas que Dios odió. Luego, cuando menos se pensó, llegó a ser una doctrina. ¿Qué era? Nico, significa: "conquistar". Laita: "el laico". "Conquistar el laico". Poner la santidad en la plataforma y dejar que el laico pague por ello. Así que allí lo tienen Uds. Así que eso es exactamente. Así que todos seguimos los mismos pasos y volvemos a entrar en la oscuridad otra vez, tan rápido como podemos entrar.
60 Yo solía reunir ganado. Yo estuve allá en una ocasión. La Asociación Hereford apacienta en el-el Valle del Río Troublesome, y si Ud. puede cosechar una tonelada de paja en su rancho, Ud. puede poner una vaca en los pastos. Y entonces, la cantidad de toneladas que Ud. pueda cosechar, tanto así de ganado producirá su-su rancho. Ellos los marcan y los ponen allí. Ellos tienen una puerta de retención, para que así ellos no puedan entrar en propiedad privada, a medida que bajan de la montaña. Yo solía sentarme allí con el inspector de ganado varios días, con mi pierna doblada alrededor de la perilla de la silla, las observaba cuando pasaban.
Y ese inspector de ganado se paraba allí. La nuestra era la "Huella de Guajolote", y la del vecino era un "Trípode", la "Barra de Diamante", y Grimes al lado de nosotros, y por todas partes allí, todas las diferentes clases de marcas pasaban por allí. Pero, ¿saben qué? Ese inspector de ganado nunca le ponía nada de atención a la marca. El quizás le daba una ojeada y miraba por allí, pero eso no era. El nunca se fijaba en la marca, sino que de seguro examinaba la cédula de identificación de la sangre. No había vaca que pudiera pasar a ese pastizal a menos que ella fuera una Hereford registrada.
Y de esa manera será en el Tribunal del Juicio. El no les preguntará a Uds. si pertenecen a la Iglesia de Dios, a las Asambleas de Dios, o a los Pentecostales de la Santidad, o si Uds. son Unitarios, "Dualitarios", Trinitarios, "Tetrarios", "Quintuarios", o lo que Uds. sean. El buscará la cédula de identificación de la Sangre. Y eso es lo que los meterá a Uds., será la Sangre. "Y veré la Sangre y pasaré de vosotros". Exactamente correcto, hermanos, ¿ven? Eso es correcto.
61 Así que, regresando. Miren, nos damos cuenta que hubo una conferencia. Ellos habían olvidado todo al respecto. Ellos recibieron... Moisés recibió allá sus credos y se olvidó de la carga. Pero Dios escogió un lugar y El tuvo una conferencia. Y El llamó a Moisés. "Quita tu calzado, Moisés, porque estás en tierra Santa. Yo he oído el clamor de Mi pueblo. Yo me he acordado de Mis promesas que hice a Abraham, y Yo te voy a enviar a ti allá para que los liberes".
Miren, Moisés supo que esa Voz era Dios, porque era Escritural. Miren, todo aquel que pase y vea una voz, si no es una voz Escritural, déjenla en paz. Si la Biblia dice así, entonces créanlo, porque es una voz Escritural. La gente viendo ángeles y todo lo demás... Joseph Smith vio uno. Yo no estoy de acuerdo con Joseph Smith, porque no fue Escritural, pero yo no digo que el hombre nunca vio un ángel. Yo no debo disputar la palabra del hombre. Ha habido muchos ángeles, y todo lo demás que han visto. Pero si un ángel... Pablo dijo en Gálatas 1:8: "Si un ángel del Cielo os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema". Eso es correcto. Quédense con la Palabra, exactamente allí con la Palabra; y lo que la Palabra dice, quédense exactamente con Ella. No se muevan de allí.
62 Y Moisés vio que la conferencia que él estaba llevando a cabo con Dios, o mejor dicho, que Dios la estaba llevando a cabo con él, fue exactamente Escritural, porque Dios hizo la promesa y El dijo que El los liberará. Y Dios dijo: "Yo te escogí, Moisés, y tú vas a ir allá para hacerlo". Moisés fue a Egipto y obró los milagros que Dios le dijo. No tenemos tiempo para entrar en ello como quisiera, pero Uds. entienden.
Cuando él salió, sacando a los hijos de Israel para llevarlos a la tierra prometida, justo en el puesto del deber estaba el Mar Rojo. Es extraño cómo Dios guía a Sus hijos directo a trampas, algunas veces a sillas de ruedas, algunas veces a ataques al corazón, algunas veces... El guía a Sus hijos. ¿Por qué? Para ver cómo van a actuar, ver cómo... ver qué reacción ellos tendrán a una acción, ver lo que ellos harán.
63 Todo hijo que viene a Dios debe ser examinado, probado. En el Antiguo Testamento un hijo nacía en una familia, pero él tenía que entrar en tutoría y crecer y ser probado. Y luego él era posicionado como hijo, o adoptado, posicionado dentro del cuerpo, o dentro... Luego cuando él era posicionado, una vez posicionado, entonces su nombre era tan bueno en el cheque como era el de su padre. El era heredero de todas las cosas. Allí es adónde Dios está llevando a Su Iglesia, dándole las pruebas.
Allí estaba el Mar Rojo, justo en el puesto del deber. ¿Qué podían hacer? Miren, parecía que toda la naturaleza estaba clamando por ellos. Allí venía el ejército de Faraón, los carros. Allí estaban las montañas en ambos lados. El Mar Rojo los tenía atrapados. Parece que era un... parece que la naturaleza ha de haber clamado por ese gran ejército de dos millones y medio de gente allí en ese valle, indefensos, sin espadas, sin nada con qué pelear. Así que, ¿qué sucedió? Hubo una emergencia aconteciendo, y Moisés seleccionó una cierta roca y fue detrás de ella y llamó a una conferencia. Me gusta eso. "¿Qué debo hacer, Señor?"
64 ¿No sería bueno si todas las iglesias llamaran a una conferencia ahorita, cuando vemos de la manera que las cosas van, que pudiéramos llamar a una conferencia, y comprender y volver al pasado y darnos cuenta qué clase de Iglesia Dios tenía en el principio, llamar a una conferencia y venir a cuenta uno con el otro, ver qué hizo la primera Iglesia, qué clase de espíritu estaba en ellos, y qué clase de señales les siguieron, qué clase de ministerio ellos tenían, qué clase de gente ellos eran? ¿No sería maravilloso si hiciéramos eso? [La congregación dice: "Amén"-Ed.]. ¡Sería una cosa maravillosa!
Moisés hizo eso. El fue detrás de una roca en alguna parte, y dijo: "Señor, ¿qué puedo hacer? Aquí está esta gente. Yo estoy exactamente en el puesto del deber. Yo hice exactamente lo que Tú me dijiste que hiciera. Y aquí me estoy enfrentando con esto".
65 Quizás Uds. están sentados aquí esta noche, madres ancianas que han criado un montón de niños. Los criaron así como Susana Wesley. Ella tuvo diecisiete hijos, sin embargo ella podía tomar tres horas al día para orar y guiarlos a Dios. Esa es la razón que ella tuvo a un Carlos y a un Juan. En estos días presionamos un botón, y los platos se lavan; presionamos un botón, y la ropa se lava; y no tenemos tiempo para nada. ¿Ven?, hay algo mal en alguna parte. Miren, ¡oh, lo que el diablo le puede hacer a la gente!
66 Fíjense. Pero ahora ellos llevaron a cabo esta conferencia, y Moisés consultó a Dios. El esperó allí hasta que obtuvo órdenes, como hizo Adán. El esperó hasta que hubo órdenes de qué hacer. Moisés esperó hasta que él recibió órdenes, como lo hizo allá arriba. ¿Qué...? "¿Cómo los voy a liberar? ¿Qué puedo hacer?"
"Ve allá y diles que el YO SOY te envió". Eso fue todo.
Aquí él está ahora exactamente en el puesto del deber otra vez, justo en el puesto del deber, y el enemigo llega. Quizás él ha llegado a Ud., quizás a Ud., quizás a Ud., Ud., Ud., por todas partes aquí. Problemas de corazón, enfermedades, aflicciones en su cuerpo, ¿qué puede Ud. hacer? ¿Ha orado Ud. fervientemente? ¿Está todo bien? Entonces tengamos una conferencia. ¡Amén! Démonos cuenta qué hacer.
67 Ud. dice: "Hermano Branham, yo he tratado de recibir el Espíritu Santo. Yo he buscado a Dios, yo he buscado a Dios, y yo no puedo recibir el Espíritu Santo".
Tengamos una conferencia entonces y démonos cuenta qué es lo que está mal. El Espíritu Santo es un revelador de los secretos del corazón. La Biblia así lo dice. Démonos cuenta qué es lo que está mal. Veamos cuál es la razón que Ud. no recibe el Espíritu Santo. Démonos cuenta qué está mal. Tengamos una conferencia.
Moisés tuvo una conferencia y él esperó hasta que él recibió órdenes. Yo estoy muy en contra de esta "super extraordinaria" sanidad Divina que ellos tienen en el país hoy día. Pudiera ser que Uds. no me acepten después de esta declaración, pero la voy a decir de todas maneras. Ellos tienen tanto de esa cosa super extraordinaria. "Oh, sanidad Divina, todos, la única cosa que Uds. necesitan hacer (¡aleluya!), es que pongan manos sobre Uds. ¡Oh, gloria a Dios!" ¡Eso no es! ¡Arrepiéntanse, y enmiéndense con Dios! Eso es lo que necesitamos: más arrepentimiento.
68 Yo leí una carta proveniente de la iglesia Luterana no hace mucho. No estoy diciendo esto como un halago propio, Dios sabe que proviene de mi corazón, delante de esta Biblia. El estaba verdaderamente partiendo a pedazos a uno de esos evangelistas tocante a algunas de sus "super extraordinarias" ideas de sanidad. Dijo: "Qué tocante a la pequeña Deborah Stadsklev, cuando la madre manejó hasta aquí y estaba parada allí cuando..." Esa niñita había muerto esa noche, y eso fue la siguiente tarde. Muerta; el doctor la había pronunciado muerta y todo; fría y tiesa. La pusieron en mis brazos y oré por ella. La bebé empezó a llorar; la devolví a los brazos de la madre. Esa madre estaba parada allí viendo eso. Ella escribió cuando su niñita se enfermó en Alemania, la Sra. Stadsklev. El Capitán Stadsklev (él es amigo de Billy Graham), uno de mis asociados en la reunión, escribió ese libro que Uds. están adquiriendo aquí ahora: Un profeta visita Africa. Y ahora... y estuvo allí presente cuando el Angel del Señor vino y ellos tomaron Su fotografía, esa Columna de Fuego que descendió, que viene a las reuniones. El tomó la fotografía de eso, vio todo eso.
69 Y así que él... Cuando la niña de él murió, esa madrecita no tenía nada de paz. Ella telefoneó desde Alemania, y el avión de retropropulsión de la fuerza aérea americana, me iba a llevar allá a Alemania. Dijo: "Esta niña puede ser resucitada".
Yo dije: "Permítanme ver lo que dice el Señor". Y esperé, y esperé. Pasaron dos días. El doctor fue muy amable. Ellos ni siquiera... Ellos los tenían alrededor de allí gritando sobre la niña, y gritando y alborotando de esa manera, y todo, pero no había vida. Yo esperé.
Una mañana el Espíritu Santo me despertó y dijo: "No toques eso, no reprendas eso. Esa es la mano del Señor". Y yo les hablé.
Ese ministro Luterano dijo: "¿Por qué no esperaron Uds. de esa manera, hasta que recibieran una decisión bien definida de parte de Dios?" Entonces Uds. saben dónde están parados. Esperen hasta que tengan: ASI DICE EL SEÑOR; entonces Uds. saben en dónde están.
70 [Porción sin grabar en la cinta-Ed.]... cabello. Algo falló en alguna parte. Algo fue... Ellas de seguro lo hacen ahora. Ellas dicen que es porque tenían dolores de cabeza. Bueno, hermano, entonces no debería haber ni un dolor de cabeza en el país. Sí, señor. Hay algo mal en alguna parte.
Y eso solía estar mal para las mujeres Pentecostales. Yo no he estado en el movimiento Pentecostal sino sólo un poquitito, pero lo veo creciendo gradualmente, creciendo, llegando a ser... Uds. están mirando mucha televisión, muchas cosas que Uds. no deberían ver, en lugar de tener reuniones de oración y volverlas a la Iglesia de Dios, esas noches de oración como ellos solían tener. Con razón no podemos tener un avivamiento.
Dios pudiera enviar a un Oral Roberts, a un Tommy Hicks, y a los demás, por todo el país, y todavía no tenemos nada sobre qué edificar, hasta que regresemos al avivamiento antiguo de San Pablo y el Espíritu Santo de la Biblia otra vez de nuevo en la iglesia. Los diáconos de la iglesia están casados cuatro o cinco veces y toda esa clase de cosa, cuando Uds. saben que eso no es la Biblia. Amén.
71 Yo le dije a una señora el otro día... Ella dijo: "Déjame decirte, yo no uso esos pantaloncitos cortos". Dijo: "Yo uso pantalones de mujer".
Yo dije: "Eso es peor". Correcto. ¡Sí, lo es! La Biblia dice que es una abominación que la mujer vista ropa de hombre. Eso es suciedad. Sí. Una mujer dijo que ya no hacen ropa. Ellos todavía hacen máquinas de coser y Uds. pueden comprar telas. No hay excusa. Lo que Uds. necesitan es el Bautismo del Espíritu Santo...?... Es verdad. ¡Amén! Uds. piensan que estoy loco, pero no lo estoy. Yo sé exactamente en dónde estoy. Eso es correcto.
Se visten de esa manera y salen a la calle. Ud. pudiera ser tan virtuosa para su esposo como pudiera ser, Ud. pudiera ser tan virtuosa para su novio como pudiera ser, pero en el Día del Juicio Ud. responderá por adulterio. Ud. será culpable de cometer adulterio. Jesús dijo: "Cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón". Ud. se presentó de esa manera, y el pecador la miró. Cuando él responda por adulterio, ¿quién es culpable? ¡Ud.!, por presentarse de esa manera. ¡Amén!
72 Miren, esa es la verdad. No se enojen conmigo. Esa es la Palabra del Señor. Oh, lo que necesitamos es una conferencia en Pentecostés (exactamente correcto), de regreso a una conferencia de Pentecostés.
Nos damos cuenta que Moisés se quedó allí hasta que Dios le dio órdenes. Y cuando él salió de detrás de esa roca, yo me lo imagino diciendo: "¡Sigamos adelante!"
Algunos de ellos dijeron: "Adelante, ¿adónde?"
"Sólo continúen marchando, eso es todo". Cuando su pie tocó el agua, el Mar Rojo se abrió y la tierra seca apareció. Y él caminó en tierra seca, porque él tuvo una conferencia con Dios.
73 ¡Oh!, hay muchas conferencias de las que pudiéramos hablar. Hubo una conferencia, la del-del horno de fuego ardiendo, hubo la Conferencia del Foso de los leones. Hemos tenido muchas conferencias.
74 Tomemos otra. Es la llamada Conferencia del Getsemaní. Esa fue una terrible conferencia. El no tenía que morir joven. El no tenía que morir. Pero cuando El vio a la humanidad perdida en su condición, dijo: "No se haga Mi voluntad, sino la Tuya". Angeles vinieron y le ministraron. Eso es lo que....
Entonces después de Su muerte, entierro, y resurrección, tenía que haber otra conferencia: cómo debería ser dirigida la Iglesia Cristiana. Si debería ser dirigida por obispos, o si debería ser dirigida por papas, o cómo debería ser dirigida. Así que Jesús les dijo en Lucas 24:49: "Pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén. Yo voy Arriba para tener una conferencia con el Padre. Yo les voy a decir después de un tiempo, pero Uds. esperen allí, hasta. Yo les diré cómo debe ser dirigida, si es que Pedro debe ser el primer papa o no, si vamos a tener obispos y arzobispos y presbíteros de distrito y todo lo demás".
"¿Cómo lo vamos a hacer? Esperaremos y nos daremos cuenta".
Y ellos tuvieron lo que ellos llamaron La conferencia de Pentecostés. Ellos subieron esos escaloncitos de afuera, y entraron en el aposento alto donde ciento veinte personas se reunieron con una pequeña candela de grasa encendida. Ellos no comieron ni bebieron por diez días, esperando. ¿Cuál es el informe de la conferencia? Era uno muy largo. Y ellos tenían diez días esperando, y después de un rato llegó el informe. Oh, sí.
75 No fue un sacerdote que venía por el camino con su cuello volteado al revés y dijo: "Vamos a tomar ahora la primera comunión. Uds. saquen su lengua y yo les daré la ostia, y yo beberé el vino". ¿No hubiera sido eso...? Ni tampoco fue un predicador que venía por el camino, y dijo: "Denos la diestra de compañerismo. Pondremos su nombre en el libro y lo pondremos en prueba por seis meses". No. Esas son las conferencias del hombre. De esa manera lo hacen en los concilios y conferencias.
76 ¿Qué sucedió? Cuando llegó el informe de la conferencia, estaban todos unánimes juntos. "Y de repente vino del Cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen". Ese fue el informe procedente del Centro de Operaciones. El Espíritu Santo iba a dirigir a la Iglesia, no dogmas hechos por el hombre, sino el Espíritu Santo. Esa fue la Conferencia de Pentecostés.
77 Y yo pienso que todos, desde Martín Lutero hasta los Pentecostales, deberían regresar y tener una conferencia otra vez, darse cuenta que es el Espíritu Santo el que debe dirigir a la Iglesia, no dogmas, y credos, y "ave Marías", y el credo de los apóstoles. Yo quiero que Uds. me encuentren el credo de los apóstoles en la Biblia. No hay tal cosa; pero sin embargo nos doblegamos a él, y lo decimos, y sólo como... Esos son los que se unen a logias; esos no son Cristianos.
78 Los Cristianos son nacidos de nuevo del Espíritu de Dios. El Espíritu Santo entra en ellos, y son llenos del Espíritu. La vida de Cristo vive a través de ellos. Ellos van por todo el mundo y predican el Evangelio. ¿Qué tan lejos? "Por todo el mundo". ¿Sólo para esta generación? Para todo el mundo. "Estas señales seguirán a los que creen". ¿Qué tan lejos? "Por todo el mundo, a toda criatura que cree". "En Mi Nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán".
Esas fueron las órdenes. Esas fueron las órdenes provenientes de la conferencia de Dios en el Cielo. Envió el informe, un viento recio que soplaba. ¡Oh!, ¡cuán lejos...! Necesitamos otra conferencia, hermanos.
¿Qué sucedió en la conferencia? Ellos no subieron y dijeron: "Yo ahora tomo tu mano de compañerismo; yo llegaré a ser miembro de esta iglesia", y tomaron un salero con agua, y rociaron el agua tres o cuatro veces... tierra o agua, lo que Uds. le quieran llamar, sobre ellos y salieron y dijeron: "Ahora Uds. son miembros".
Eso no es correcto. No señor. Ni siquiera el bautismo de agua, el cual es tan esencial. Todavía no era eso. Pero vino allí un estruendo como de un viento recio que soplaba, que vino del Cielo, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados. Ese fue el informe de esa conferencia, la manera que Dios decidió dirigir Su Iglesia. ¡Cómo nos atrevemos a tratar de mover una sola pizca de eso! ¡Cómo nos atrevemos, como hombres, de añadir una cosa o quitar una cosa de ello! ¿Cómo lo podemos hacer? De esa manera debe ser dirigida la Iglesia: por el poder del Espíritu Santo.
79 Hubo otra conferencia que se llevó a cabo inmediatamente. Esos hombres salieron, predicaron el Evangelio, sanaron a los enfermos. Pedro y Jacobo [el Hermano Branham quiso decir: Juan-Trad.] pasaron por la puerta que se llama la Hermosa, y allí estaba un hombre cojo de nacimiento. Dijo: "No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el Nombre de Jesucristo, levántate y anda". Y se fue andando.
Y entonces, ¿qué sucedió? Ellos los querían poner en la cárcel. Las columnas de las noticias tenían toda clase de crítica en ellas. Y ellos sólo los criticaron y los llevaron ante el concilio, el concilio general de la iglesia. Cuando ellos estaban en las cortes del Sanedrín, les prohibieron predicar ya más esa clase de Evangelio. Así que, ¿qué iban a hacer ellos? Se les fue prohibido predicar el Nombre de Jesucristo. Así que, ¿qué podían hacer ellos? Ellos llevaron a cabo otra conferencia: La conferencia de Hechos 4, la llamaremos a ésa, la de Hechos 4. Ellos fueron a los suyos.
80 ¿No sería eso bueno si todos los Cristianos fueran a los suyos, y que todos los grupos se reunieran y llevaran a cabo una conferencia: "¿Qué debemos hacer?"? El comunismo está carcomiendo nuestra nación; nuestra nación está empezando a ser infiltrada con el comunismo; y la iglesia se está poniendo fría y ritualista. Las iglesias están peleando unas con las otras, y hablando mal unas de las otras, y los miembros están....
Uno les pregunta si son Cristianos, y ellos dicen: "Yo pertenezco a tal y tal iglesia". Eso no tiene nada que ver con ello. A Dios no le importa eso [el Hermano Branham truena sus dedos-Ed.] tocante a su organización. El quiere saber si Uds. han nacido de nuevo. Si no han nacido de nuevo, entonces Uds. no son Cristianos. Uds. sólo pueden ser Cristianos cuando reciben la Vida de Cristo dentro de Uds. Si la Vida de Cristo está en Uds., producirá la Vida de Cristo. ¿Pudieran Uds. recoger duraznos de una planta de sandía? Seguramente que no.
81 Así que, fíjense bien qué sucedió. Ellos se reunieron, se congregaron, y citaron la Escritura, le repitieron la Escritura a Dios. Dijeron: "¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan cosas vanas?" Telepatía, adivinación, adivinación de los pensamientos, y todas esas cosas vanas. Dijeron: "¿Por qué piensan cosas vanas? Verdaderamente... extiendes Tu mano para que se hagan sanidades mediante Tu Santo Hijo Jesús". [El Hermano Branham parafrasea: Hechos 4:30-Trad.].
Y cuando ellos tuvieron esa conferencia, y había allí como unos... creo yo fueron convertidos como tres mil en el Día de Pentecostés, y muchos cientos y cientos después de eso. Ellos probablemente eran una multitud de ocho mil o diez mil personas, reunidas dentro de un cuarto para orar. Y cuando lo hicieron, y todos oraron unánimes, todos al mismo tiempo, la Biblia dice que el edificio en donde estaban congregados tembló, la respuesta regresó, y la Biblia dice que ellos predicaron con denuedo la Palabra de Dios.
Algunas personas tienen miedo de predicar la Palabra. Ellos serían excomulgados de su iglesia, de su organización. Ellos tienen miedo de ello. Entonces necesitamos otra conferencia, La conferencia de Hechos 4. ¿Tienen miedo Uds. de lo que alguien vaya a decir? Mientras que Dios lo dijo, quédense con ello; vivan por ello, mueran por ello. Correcto. Entonces Uds. resucitarán por medio de ello; es la única cosa que Uds. harán; es de la única manera que Uds. pueden resucitar.
82 Una conferencia. Lo que nosotros necesitamos, es una conferencia. "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta". "Si Mi primera Iglesia..." Si Dios viniera al edificio esta noche y dijera: "Si Yo ordené a Mi primera Iglesia y ellos tuvieron la bendición de Pentecostés sobre ellos, y lo que ellos hicieron, es que salieron y mostraron las señales de la resurrección. Venid y estemos a cuenta: ¿por qué no tenemos eso esta noche en nuestros grupos Pentecostales, en nuestros grupos Metodistas, en nuestros grupos Bautistas, en nuestros grupos Presbiterianos? ¿Cuál es el problema? Algo está mal. Así que, venid, estemos a cuenta".
¿Cómo pudiéramos estar a cuenta? ¿Con los Metodistas? ¿Con los Bautistas? ¿Con los Presbiterianos? No, señor. Nosotros únicamente podemos estar a cuenta por medio de la Palabra de Dios. Y la primera Iglesia fue llena con el Espíritu Santo, y salió con grandes señales y prodigios. La vida de Jesucristo ella misma se proyectó en la vida de cada una de esas personas. Venid a... ¿Por qué....?
83 "Estemos a cuenta", dice Jehová. "Venid y estemos a cuenta: si vuestros pecados (la incredulidad de Uds.) fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana. Yo les daré un avivamiento. Yo os restituiré los años que comió la oruga, que el saltón comió. (Lo que dejaron los Luteranos, los Metodistas se lo comieron. Lo que dejaron los Metodistas, los Bautistas se lo comieron. Lo que dejaron los Bautistas, los Pentecostales se lo comieron). Pero Yo os restituiré", dice el Señor. "Yo..."
Es una garantía de restitución, esa es una cosa cierta; Dios lo prometió en Joel 2. "Venid, estemos a cuenta". Lo que uno comió y dejó, el otro se lo comió hasta abajo, hasta que llegó a ser un tronco. La Pentecostal, la verdadera Iglesia Pentecostal, la verdadera gente Pentecostal, la verdadera experiencia Pentecostal ha empezado... es una cosa histórica.
84 Miren, ¿cómo me pudiera parar yo y enseñarles teología? ¿Qué bien me haría decirles a Uds. que Dios en un tiempo sanó a los enfermos, e-e hizo andar a los cojos y a los ciegos ver, y derramó Su Espíritu, y ellos tuvieron discernimiento de espíritu, e hizo todas esas cosas, y la señal del Mesías, la resurrección, los siguió por todas las edades de la Iglesia, y luego decirles que esos días pasaron? ¿Para qué sirve un Dios histórico, si El no es el mismo Dios de hoy?
¿Para qué sirve darle a su canario vitaminas para que le forme buenas plumas y fuertes huesos en las alas, y mantenerlo en una jaula? ¿Para qué sirve una escuela de teología, si Uds. no le pueden dar a saber a la persona que Dios todavía es Dios? Si El es sólo una cosa histórica, El pertenece al pasado. Pero El no está muerto; El está vivo por los siglos de los siglos. El está aquí ahora. El es Cristo. Ciertamente que sí.
85 Necesitamos reunirnos y estar a cuenta. ¿Qué clase de Iglesia fue al principio? Esa es la clase de Iglesia... Dios es infinito y no puede cambiar Su mente. Si Dios hace una decisión, El la tiene que cumplir. Su primera decisión de una verdadera Iglesia Cristiana fue basada en una experiencia de Pentecostés. Miren, esa no fue una organización Pentecostal; esa fue una experiencia de Pentecostés, la cual puede venir a Metodistas, Bautistas, Católicos, Presbiterianos, o a quienquiera. Esa es una experiencia que viene.
86 Amor, el amor de Dios. El amor es la cosa más poderosa que hay en el mundo. Es amor el que conquista todo. Por medio de eso Uds. conquistarán, por medio de Amor Divino, amándose unos a otros, amando la causa de Dios, amando a Cristo, amando a la humanidad sufriente. Así es cómo Uds. conquistan.
Sí, ellos tuvieron una conferencia, y ellos recibieron órdenes, y salieron, y predicaron la Palabra de Dios con denuedo.
Miren, yo voy a hablar de una sola conferencia más, sólo por un momento. Uds. quizás faltaron a la Conferencia de Ginebra. Uds. quizás ni siquiera oyeron el informe en la radio. Uds. quizás faltaron a la del Getsemaní, a la cual Uds. sí faltaron. Uds. quizás faltaron a la del Mar Rojo; a la cual Uds. sí faltaron. Uds. quizás faltaron a todas esas conferencias, pero aquí está una en la cual Uds. van a estar; esa es La conferencia del Juicio. Todos Uds. van a estar allí. Cada uno de nosotros se va a parar en el Trono del Juicio de Cristo para dar cuenta de lo que hemos hecho con Cristo y Su Palabra.
87 Va a haber una conferencia, y Uds. van a estar allí. A mí no me importa lo que Uds. hagan con su vida. Uds. pueden cometer suicidio, ser tan culpables que quieran que su cuerpo sea incinerado y llevado a los mares y soplarlo a los cuatro vientos. Uds. estarán allí de todas maneras, pues toda rodilla se doblará y toda lengua confesará. Quizás ha habido poderosas conferencias, y muchas de ellas a las cuales Uds. faltaron; pero hay una a la que Uds. van a asistir.
88 Y déjenme decirles a Uds., cada vez que vean una cana, eso significa que Uds. van rumbo a eso. Cada vez que Uds. oigan una sirena, Uds.... es una conferencia que Uds. van a encarar. La muerte los está encarando a Uds. Jóvenes o ancianos, quienes sean Uds., Uds. van rumbo a eso. Cada vez que Uds. pasan por un cementerio, eso habla de que Uds. van a esa conferencia. Cada vez que oyen un sermón predicado, una alabanza cantada, significa que Uds. van rumbo a esa conferencia; y Uds. van a estar allí. Y Uds. van a responder por lo que han hecho con la Palabra de Dios, y con el Hijo de Dios, y con el Espíritu Santo que El les envió a Uds. Uds. van a responder. Uds. van a estar en esa conferencia.
89 Así que, si Uds. están aquí esta noche, amigos, y nunca han tenido esa conferencia con Dios... Los pecados de algunos hombres se hacen patentes antes que ellos vengan a juicio, confesados, mas a otros se les descubren después. Si los de Uds., su incredulidad, no ha sido todavía confesada, ¿no pensaría de ello mientras oramos, mientras inclinamos nuestros rostros?
En la reverencia y la solemnidad de este momento, haré una solemne pregunta por la que toda la gente tendrá que responder. Sean sinceros, y permitan que este sea un tiempo que escudriñen su corazón. ¿Qué harán Uds. después de esta conferencia?
Esta es una conferencia esta noche, en la que nos hemos reunido aquí en este gimnasio para hablar la Palabra de Dios en los edificios y demás, igual que ellos lo hicieron en los días primitivos. La misma Palabra de Dios ha sido predicada. Uds. van a tener que responder por ello algún día.
¿Hay de esos aquí esta noche, o mejor dicho, cuántos son (yo sé que hay un grupo), los que me dirían esto: "Hermano Branham, yo nunca he nacido del Espíritu de Dios; yo nunca he recibido el Espíritu Santo de Dios; y yo sé que si me paro en aquella conferencia, después de que se me ha dicho tan claramente por la Escritura, testificado por el Espíritu Santo, yo voy a tener que dar cuenta por mi vida en aquel día; yo voy a levantar mi mano a Dios y pedirle a El que tenga misericordia de mí, y yo quiero una conferencia ahorita mismo con Dios; me gustaría hablarlo con El ahorita"?
90 Ahora, todo rostro inclinado (maldito sea el que levante sus ojos), ¿levantaría su mano y diría: "Ore por mí, Hermano Branham; yo no he recibido todavía el Espíritu Santo"? Dios la bendiga, señora. ¿Alguien más? De seguro Ud. sería honesto en un tiempo como este. Yendo a una conferencia. Dios la bendiga, señora. Dios la bendiga, señora. Dios lo bendiga a Ud., aquí.
Uds. van a una conferencia. Y recuerden que no importa cuán buenos Uds. hayan sido en la iglesia, eso no-eso no sirve para nada. Los fariseos en los días de Jesús vivieron una vida mucho más santa que la que vive cualquiera de nosotros aquí en América; pero ellos fueron considerados perversos porque eran pecadores, incrédulos en Cristo y Su Palabra. Y yo les he dicho claramente a Uds. de la conferencia, cuando Dios quiso decidir qué clase de Iglesia El quería; fue una Iglesia de Pentecostés, llena del Espíritu. Si Uds. no han estado todavía en esa conferencia, ¿levantarían su mano y dirían: "Hermano Branham, ore por mí"? Dios le bendiga, a Ud., a Ud.
91 En los balcones a mi izquierda, ¿hay algunos allí que levantarían su mano quietamente? Con sus rostros inclinados, todos orando, por favor. En los balcones a mi izquierda, los balcones de allá atrás, los balcones a mi derecha. Ahora recuerden: yo no los puedo obligar que hagan esto. Yo únicamente puedo hablar la Palabra. Depende de Uds. decidir. Pero recuerden: este mismo mensaje los juzgará a Uds. Está en cinta magnetofónica en el Cielo, y será tocada otra vez en el Día del Juicio.
92 Si Uds. no han recibido todavía el Espíritu Santo de Dios, nunca han tenido esa conferencia y se han reunido como aquellos lo hicieron en la Conferencia de Pentecostés, Uds. no lo han recibido a El todavía, sólo levanten su mano, digan: "Ore por mí, Hermano Branham". Alguien que no ha levantado su mano a Dios, levante su mano.
93 Nuestro Padre Celestial, Tú ves las manos de la gente. Hubo algunos con suficiente valor que levantaron sus manos y querían ser recordados en oración. Cuán agradecidos deberían estar. Jesús dijo: "Ninguno puede venir a Mí, si Mi Padre no le trajere primero". Pienso en aquellos que sabemos que están sentados aquí que no levantaron su mano. Mira, Tú eres un discernidor del corazón. A aquellos que Tú les hablaste y no levantaron su mano, ¿qué va a ser de esas personas en el Día del Juicio, cuando se lleve a cabo la conferencia final? Allí entonces será decidido quién recibió, y quién no recibió, cuyos nombres estaban en el libro. Tú dijiste: "A aquellos a Mi izquierda diré: 'Apartaos al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles'".
94 Y sabemos que el tiempo está a la mano. Vemos al mundo en una condición de estremecimiento, y temblando, sabiendo que los átomos pronto se estarán quemando, y los cielos estarán en fuego, como dijo el apóstol Pedro, y ardiendo serán deshechos. Los átomos de la tierra pronto arderán. Habrá un reemplazo, y ni siquiera habrá polvo que quede de la gente.
95 ¿Y entonces qué, Señor? Quizás quinientos años desde ahora, una vieja lápida puesta a un lado, allá en los vientos aulladores, y en el sol candente, cuando esté cerca del sol para su purificación antes del Milenio, quizás el nombre de algunas de las personas aquí estará escrito en ella. ¿Dónde estará su alma errante? Que ellos no miren a este mundo moderno de hoy, sino que ellos miren hacia Cristo, escuchen el mensaje y el Mensajero que está hablando en el corazón de ellos. Bendice a aquellos que levantaron su mano, Padre. Que ellos reciban el Espíritu Santo, te pido en el Nombre de Cristo.
Y con nuestros rostros inclinados por un momento, ¿dijeron realmente eso en serio? ¿Vendrían aquí al altar? Levántense de sus asientos ahora, Uds. que levantaron su mano.
Y Uds. que no levantaron su mano, si Uds. van a estar en el futuro en otras reuniones, lo cual Uds. lo verán aquí también, lo verán a El por la oración abrir los ojos de los hombres que están ciegos, lo verán a El sanar a aquellos que están cojos y torcidos, lo verán a El ir a la audiencia y discernir los meros pensamientos del corazón de la gente, así como El dijo.
96 Miren, ese es Su Espíritu que les está hablando a Uds. ahora. El Espíritu que Uds. vieron aquí esta noche que conoció los secretos del corazón, ese mismo Espíritu me dice que hay muchos aquí que deberían venir. Levántense ahora y vengan aquí y párense alrededor de esta pequeña plataforma aquí por un momento para orar. ¿Vendrán Uds.? Dios lo bendiga. Dios la bendiga, señora. Dios lo bendiga....
No pases de mí, oh, bondadoso Salvador... (¿Vendrán, quienquiera? ¿Creen Uds. que Dios oye la oración? Vengan...?...)
Mientras a otros Tú estás llamando,
No....
97 Vengan de los balcones, ¿no vendrán? Algunos de Uds. jovencitos justo en el momento crucial de la vida, vengan y acepten a Cristo como el Salvador de Uds., ¿lo harán esta noche? Sean llenos con el Espíritu Santo. Este es el tiempo, el lugar, todo está preparado ahora. No habrá excusa, pues el mismísimo Espíritu que está aquí esta noche, se parará contra Uds. en el Día del Juicio. Miren, Uds. saben que yo no diría estas cosas a menos que así fueran. Vengan Uds. del balcón.
¡Salvador, Salvador...! (Reverentemente, calladamente, ¿se levantarán de sus asientos? Sólo caminen unos cuantos pasos, vengan aquí, párense aquí. Dios bendiga a estos que vienen).
Mientras a otros Tú estás llamando,
No pases Tú de mí.
[El Hermano Branham empieza a tararear-Ed.].
98 Yo estuve al lado de una jovencita, no hace mucho, que se estaba muriendo, que había estado en una de las reuniones. Ella dijo: "No ore, Hermano Branham", ella dijo, "mi día de oportunidad ya pasó". Ella dijo: "Una noche en su reunión, me era difícil quedarme en el asiento, sentada con mi novio. Yo le pregunté si él pasaba; el dijo: 'No'".
Dijo: "Esa fue mi última oportunidad". Ella dijo. "Es muy tarde ahora". La muchacha era una jovencita fina, pero se estaba muriendo de una enfermedad social por la que no podían hacer nada. Y el empresario de la funeraria, un amigo mío, metió el líquido embalsamador en su cuerpo. Seguían metiéndolo, no podían saber adónde se iba. Lo olían. Había hoyos en el cuerpo de la jovencita. Una jovencita hermosa. Ella dijo: "Yo debería haber pasado".
Ella era un miembro de iglesia. Sí, señor. Su pastor estaba parado allí, fumando un cigarrillo cuando ella se estaba muriendo. ¿Saben Uds. lo que ella le dijo? "¡Tú engañador de hombres! ¡Tú me dijiste que yo estaba bien; y tú estabas mal!" Ella dijo: "¡Yo me estoy muriendo y estoy perdida, y tú eres el causante de ello!" Ella envió a llamar a una muchacha que asiste al Tabernáculo quien trató de guiarla a Cristo. Ambas fueron juntas a la escuela secundaria. Trató de conseguir que ella fuera, pero era muy tarde. La muchacha murió antes que ella llegara allí. Ella se quería arrepentir. Ella le quería decir a esa muchacha que ella lo sentía, pues la había llamado un nombre sucio, una "santa rodadora" ["aleluya"-Trad.].
99 Siempre se sabe al fin del camino. Allí es en donde Uds. tienen su conferencia con el ángel de la muerte. Va a llegar a cada uno de Uds. Uds. lo van a encontrar una de estas mañanas. Pueda que Uds. lo encuentren en la autopista esta noche. Pueda que Uds. lo encuentren en su cama esta noche. Uds. lo van a encontrar en alguna parte. Uds. van a tener una conferencia. El está al acecho cerca ahora. Los Angeles de Dios están acechando cerca. Uds. querrán que Ellos aboguen su caso en aquel día. Uds. están hablando ahora. ¿No vendrán? Una vez más mientras...?....
Confiando únicamente en Tu mérito (no confíe en su iglesia; confíe en los méritos de El), busco Tu rostro,
Sana mi espíritu quebrantado y herido,
Sálvame por Tu gracia.
¡Salvador, Salvador, oye mi humil ...! (Trabajadores personales, ¿vendrán Uds. ahora?)
Mientras a otros Tú estás llamando,
No pases...?....
¡Salvador....!
100 Mientras los trabajadores personales están viniendo, cada uno poniéndose alrededor, que las mujeres se pongan al lado de las mujeres, y los hombres al lado de los hombres. "Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos".
... No pases Tú de mí.
¡Salvador, Salvador, oye mi humilde clamor!
Mientras a otros Tú estás llamando,
No pases Tú de mí.
Permíteme que ante Tu trono de misericordia,
Encuentre una dulce liberación... (¿No vendrán ahora? Vengan; alguien más venga. ¿Hay otro que le gustaría venir antes que cambie este servicio?)
¡Salvador, oh Salvador, oh, oye mi humilde clamor!
Mientras a otros Tú estás llamando,
No pases Tú de mí.
101 Miren, ¿a cuántos aquí les gustaría consagrar su vida de nuevo para Cristo?, levanten su mano. Sólo digan: "Desde esta noche en adelante, con la ayuda de Dios, yo consagraré mi vida a Dios. Levanten su mano, todos los Cristianos sinceros. "Yo volveré a consagrar mi vida para Dios".
Todos los que están enfermos, levanten su mano y digan: "Yo creeré en Jesucristo para mi sanidad ahora mismo. Yo creeré".
Yo creo que nuestro Padre Celestial está satisfecho con esas personas que vinieron a recibir a Cristo. ¿No creen Uds. eso?
Pongámonos ahora todos de pie por un momento, esas personas que puedan, para nuestro servicio de consagración, consagrándonos de nuevo a Dios. Pongámonos de pie ahora para renovar nuestros votos y nuestras consagraciones a Cristo. ¿Lo aman? (Muy bien, cambie la alabanza a "Yo le amo, yo le amo"). Yo le amo... Todos, ahora, todos juntos.
Yo le amo, yo le amo (hagan ahora su consagración a El),
Porque El a mí me amó;
Y me compró mi salvación,
Allá en la cruz.
Yo le amo, yo le amo,
Porque El a mí me amó;
Y me compró mi salvación,
Allá en la cruz.
Miren, cada uno de Uds. incline su rostro ahora, y en oración consagrada dese Ud. mismo a Cristo, mientras yo le pido a uno de los ministros aquí, si él viene y ofrece la oración de consagración. Aquí mismo, hermano....

 

Este mensaje fue predicado originalmente en Inglés por el Rev. Willian Marrion Branham, traducido al Español por el Tabernaculo Emanuel, Tucson, Arizona, E.U.A.